Episodio 01

Carina Szpilka: En los últimos años ha quedado evidente que la digitalización supone una parte importante de la economía española, en 2020 representó un 22% del PIB, tres puntos más que en 2019. Tenemos aún como grandes retos la digitalización de la pyme y de la sociedad en su conjunto, y la asignatura pendiente de la innovación. Pero España cuenta con algunas ventajas casi naturales: nuestra avanzada conectividad, la situación geográfica como punto más cercano de interconexión con EEUU, los hubs de emprendimiento, el gran potencial para atraer talento y el valor añadido del idioma español como uno de los principales idiomas de la digitalización.

Sergio Oslé: Es esencial contar con infraestructuras que permitan aprovechar la digitalización: en España esta infraestructura es de altísima calidad y cubre prácticamente todo el país. La cobertura de Telefónica llega a 27 millones de unidades inmobiliarias y en 5G cubrimos el 80%. En los últimos años, Telefónica ha invertido más de 10.000 millones de euros en despliegue de fibra. En conectividad, España es un referente a nivel mundial.

Carina Szpilka: Trabajando en varios frentes. Desde la escuela, centros educativos y universidades, impulsando que la programación sea un eje transversal en la educación. Las empresas tenemos también un papel fundamental en la formación de nuestros empleados, promoviendo el upskilling y el reskilling, especialmente emprendedores y grandes empresas tecnológicas, por su capacidad para formar profesionales que a su vez se conviertan en formadores de otros equipos y empresas. En el ámbito de la administración pública, debemos empezar a pensar en algún tipo de certificación de capacidades digitales y observatorios que nos permitan identificar brechas de conocimiento. Y por último, es responsabilidad individual de cada uno de nosotros el formarnos.

Sergio Oslé: Estoy 100% de acuerdo. Es especialmente importante también la capacitación digital de las pymes, en España apenas un 25% de ellas están en un nivel de capacitación suficiente, países de nuestro entorno con menor red de infraestructura digital poseen un nivel mayor de capacitación. Desde Telefónica colaboramos también con la Universidad a través de diversas Cátedras, y tenemos en marcha la iniciativa Escuela 42, escuela de formación con autoaprendizaje asistido. Pero también hay que defender el valor y la importancia de las Humanidades, desde el punto de vista profesional y personal, y buscar el balance entre una educación basada en valores y humanidades que incorpore elementos tecnológicos, con nuevas metodologías.

Sergio Oslé: Quizás estamos infravalorando la “tormenta perfecta” tecnológica que estamos viviendo: cloud, edge computing, inteligencia artificial, algorítmica… El impacto de esta revolución tecnológica es aún mayor que el de la revolución industrial. Es clave la importancia del dato: cómo gestionarlo y protegerlo. Y entender que todo va a estar digitalizado y conectado, con entornos inmersivos como el metaverso.

Carina Szpilka: Los últimos 10 años en España han sido vibrantes en emprendimiento. Ayuda a ello la creación de hubs como Madrid y Barcelona, que ocupan la 5º o 6º posición en los rankings de emprendimiento en Europa, y donde empieza a haber emprendedores de segunda o tercera generación que revierten de nuevo en el ecosistema y contribuyen a la creación de nuevas empresas. Tenemos ya 400 scaleups en España, de las que entre las 15 más importante facturaron el año pasado más de 3.300 millones de euros. España es el primer país en tener una Ley de StartUps, y eso es un avance importante. El Kit Digital es también una ayuda revelante, pero la pyme debe entender que digitalizarse no es tener una web, sino tomar decisiones en base a datos, contar con infraestructura en cloud, vender a través de canales digitales también fuera de España…

Sergio Oslé: La digitalización implica una inversión no solo en herramientas, también en talento, y de ello depende la competitividad de la empresa. Pero no tengo ninguna duda de que España va a ser un polo de innovación digital en España y en el mundo.

Carina Szpilka: España está muy atrás en innovación. En esta labor, el emprendimiento juega un papel importante, pero es necesario potenciar todo el ecosistema: las corporaciones tienen una alta capacidad de intraemprendimiento, falla aún la transferencia tecnológica entre universidad y empresa, y es necesario impulsar la innovación de las pymes.

Sergio Oslé: En un mundo cada vez más globalizado, es imposible competir sin innovar. Pero innovar no es inventar un software, innovar es buscar la forma de mejorar continuamente los procesos para hacer más eficiente el producto.

Carina Szpilka: España debe repensar sus ventajas competitivas, y exigir una voz propia. Tenemos ingredientes suficientes, como prueba la puesta en marcha del primer sandbox en inteligencia artificial de Europa. Vienen nuevas regulaciones intensas, que serán un reto para las empresas, como el Data Act, Digital Service Act, Digital Market Act y la regulación en torno a inteligencia artificial. España debe tener voz propia y aprovechar la presidencia de la UE para convertirse en actor relevante en Europa.

Sergio Oslé: España está excelentemente preparada: dispone de infraestructuras, ciudadanos formados, grandes empresas, ecosistema digital con todos los elementos para fomentar la innovación. Estamos viviendo un momento histórico, del que tal vez no seamos del todo conscientes, y esta vez no hay excusas: si perdemos el tren, la culpa será nuestra.

Carina Szpilka: España es el país del dato y de la conectividad, el país del talento, el país de scaleups. Hay que aprovechar las oportunidades de los Fondos NextGen.